viernes, 28 de febrero de 2014

10 km progresivos estrenando ruedas

Hoy otro rodaje suave para recuperar las piernas y encima con el premio de estrenar zapatillas. Las afortunadas han sido otro par de las Supernova Sequence 6 de Adidas en color gris y verde. He de decir que el anterior par ha tenido problemas en el upper a los 650 km, lo que es una gran putada, así que esperemos que se trate de un tema puntual y que este par dure algo mas.

Por lo que respecta al entreno una carrera de 10 km progresiva a 4'30'' de media y terminando a 4'15''. Ya las piernas bastante recuperadas y solo alguna molestia en las uñas de los piers, pero bien en lineas generales.


miércoles, 26 de febrero de 2014

Hoy rodaje de recuperacion de 8 km

Hoy he salido a rodar suave durante 8 km. Ya antes de salir he tenido algun que otro dilema, puesto que tenia pensado estrenar zapatillas, pero al ponermelas he optado por cambiarlas y ponerme unas viejas. La razón principal ha sido que tengo heridas en los dedos gordos de los dos pies por las uñas negras que al explotarlas se me han quedado un poco fastidiadas, y al tenerlos vendados he optado por unas zapatillas más holgadas.

Aparte no queria mancharlas de sangre el primer dia en caso de que a las uñas les diese por sangrar un poco.

Así que con unas zapatillas viejas y las piernas un tanto cargadas he ido a rodar suave, comodo y sin mirar el reloj. Han caido 8 km a un ritmo de 5' el km, así que casi ni he sudado, pero me he encontrado genial cuando he terminado.

Esta semana ire suave porque no hay necesidad de apretar ni de forzar.


lunes, 24 de febrero de 2014

XXX Maratón de Sevilla 2014 - Mi crónica

Antes de empezar con la crónica en sí, creo que es necesario que haga una pequeña reflexión acerca de lo que esperaba en esta maratón y lo que realmente he conseguido y ha ocurrido.

En esto de correr maratones las dimensiones de la prueba y de nuestros sueños son difíciles de calibrar, la magnitud del entrenamiento, la grandeza del momento, la dureza de la prueba y los 42 kilómetros que hay que superar son un todo y sinceramente creo que no se pueden valorar individualmente sino que hay que hacerlo en conjunto.

Por lo que a esta maratón respecta, el entrenamiento ha sido largo, concienzudo y exigente. El reto de bajar de 3 horas ha sido el foco que ha guiado estos casi 5 meses de entrenamientos, con muchos esfuerzos y sufrimientos que he asumido con una alegría creciente puesto que he visto como he mejorado sustancialmente mis marcas y mi forma.

Mes a mes y carrera a carrera, he ido pulverizando mis marcas en 10 km, corriendo todas ellas por debajo de 39 minutos y pudiendo llegar a correr la San Silvestre Internacional en la que firme un tiempo en meta de 37'15''. Por otro lado y cuando empecé a centrarme en mayores distancias también he pegado un salto cualitativo espectacular, firmando dos medias maratones (Getafe y Fuencarral) en 1:23, marcas que, sinceramente, no me habría planteado hace 5 meses.

Esta progresión me ha ido mentalizando de que el trabajo realizado había sido el correcto y que, sobre el papel, la marca de sub 3 era factible y era un objetivo que podía plantearme seriamente.

En base a esta progresión planifique la carrera. La idea era ir a ritmo de principio a fin, engancharme a la liebre de 3 horas e ir con ella hasta el final, y si ya en el 38 tenía fuerzas apretar un poco, pero no gastar ni un gramo de energía de mas a lo largo de la carrera. Siempre en el grupo y victoria o muerte.

Pero bueno dejémonos de análisis previos y centrémonos en la carrera.

Baje a Sevilla el sábado por la mañana con 3 amigos, 4:30 de coche sin pisarle y del tirón y llegamos perfectos para dejar las cosas en la habitación de CEAR e ir con calma a comer cerca de la feria del corredor que era en el FIBES en Sevilla.

He de decir que la feria fue bastante decepcionante. Muy desangelada, pocos stands de calidad y las marcas daba la sensación que ni siquiera estaban interesadas en estar allí. Un amigo quiso comprarse unas New Balance y siendo el patrocinador oficial de la prueba, ni vendían ni tenía tallas para que la gente se las pudiese probar.

El resto de stands por el estilo, sin modelos de zapatillas, con pocas opciones para comprar y restos de stock. Lo único que se podía comprar eran calcetines y medias de compresión, el resto de productos inexistentes o sin tallas. Incluso en el stand de Power Bar cuando un amigo quiso comprarse los geles ya no les quedaban y nos remitían a otros stands donde, evidentemente, también se les habían acabado los geles.

Menos mal, que me los traje de casa, porque en algún momento se me paso por la cabeza comprarlos en la feria y si no hubiese podido comprar los míos me habría dado algo.

Lo mejor de la feria fue encontrarme con mi compadre Oli, al que hacia un huevo de tiempo que no veía y al que conozco desde el Maratón de Nueva York de hace 3 años.



Tras la feria, un rato al hotel a vegetar y poner las piernas en alto antes de la cena. Los nervios estaban a flor de piel y estaba con esa sensación pre maratón de tener todas las cedulas de cuerpo en tensión, pero la charla con Juan Miguel y una ducha caliente rebajaron la presión y a las 8:30 nos fuimos dando un paseo hacia en restaurante italiano en el que teníamos reservada una mesa para cenar.

He de reconocer que los nervios me tenían atenazado el cuerpo y que tenia cierto grado de malestar, pero la cena y 2 cervezas me ayudaron bastante a dejar de pensar en la carrera. Puede que creáis que es una tontería, pero para mí lo peor de una maratón son los nervios y las incertidumbres previas a la carrera, ya que siempre he corrido maratones con algún objetivo y nunca he corrido sin la presión y el agobio de cumplir conmigo mismo.

Tras la cena y prontito nos fuimos al hotel a sobar y puedo asegurar que a las 11:30 ya estaba durmiendo a pierna suelta, solo me desperté por la noche una vez por el exceso de hidratación y a eso de las 6 ya estaba con el ojo abierto.

Bajamos a desayunar a las 6:30 de la mañana al comedor del CEAR, un cuenco de cereales, una tostada con mantequilla y mermelada, un zumo de naranja, 2 lonchas de pavo, 2 cucharadas grandes de miel y una muffin de la suerte de chocolate con nueces.

La gente en el comedor se la veía bastante concentrada, algún grupo con conversación suave, pero la mayoría de la gente estaba callada y desayunando mecánicamente. Lo más probable es que ese silencio y esa calma se debiese a que todos estaban medio dormidos, pero a mi me gusta pensar que es la concentración del guerrero antes de un épico combate.

Ya de vuelta en la habitación, una duchita templada para soltar los músculos, a vaciar el estomago y a terminar de prepararme. Una serie de rutinas ya adquiridas en el tiempo me mantiene tranquilo mientras me voy preparando, la ropa ordenada, el dorsal prendido en la camiseta, mis calcetines de la suerte, las zapatillas, la gorra. Todo bien ordenadito para que no se me olvidase nada.

El cielo despejado sin una sola nube, previsión meteorológica perfecta con una temperatura prevista a la hora de la salida de 9º, sin viento, sin excusas, el escenario perfecto para correr y una promesa cumplida por Sevilla que nunca falla a la hora de ofrecer las mejores condiciones para correr la maratón.

Equipado y listo enfilo con Juan Miguel hacia el estado que esta a poco más de 10 minutos andando. Y ya al salir del CEAR se empieza sentir el maratón. Grupitos de 3 o 4 corredores andando hacia el estadio, un lejano sonido de megafonía, coches pasando hacia la zona del parking del estadio. Vamos... La leche.

En ese momento ya casi no hay nervios, no se piensa en la carrera, ni nada, simplemente se anda como si fueses un autómata hasta el cajón de salida y ocupas tu puesto junto a tus miles de compañeros de carrera.

Todos somos iguales en ese momento, el olor a linimento, vaselina y cremas de todo tipo te llega por todos lados, todos llevamos la camiseta especial, los pantalones de la suerte, los geles. Todo el mundo va dando sus saltitos para calentar, comprueba que el GPS se ha conectado correctamente y que tiene todo lo necesario para carrera a pesar de que ya lo ha comprobado 100 veces.

Es el momento de desear suerte a los que tienes al lado, abrazarte con los amigos y transmitir esa confianza y esa fuerza sin palabras de una mirada de alguien que sabe el camino que te ha llevado hasta ese momento. La amistad entre corredores está llena de silencios llenos de palabras.

Entre la multitud veo el globo de 3 horas a unos 30 metros por delante de mi. Me escoltan Juan Miguel y Antonio, mis dos compañeros de entrenos, que a pesar de haberse quedado por el camino del entrenamiento por problemas y lesiones musculares no han querido dejar de venirse a Sevilla para estar a mi lado. Me acompañaran los primeros dos kilómetros y luego me engancharan en el 32 para darme soporte en los últimos 10.


Suena el Highway to Hell de AC/DC a todo volumen y empezamos a correr. Todo va bien. Salimos sin problemas y me pongo a ritmo fácilmente y sin agobiarme voy acercándome poco a poco al globo. El ritmo es perfecto a 4'10'' y he empezado de puta madre sin sentirme cansado ni pesado. Las piernas están perfectas y en cuestión de 2 - 3 km me he puesto a la altura del grupo y he encontrado un sitio bueno para correr.

Iba tan concentrado en la carrera y en buscar un buen sitio que ni me he dado cuenta de cuando me han dejado Juan y Antonio, pero no pasa nada, todo bien. La liebre marca el ritmo perfectamente y los pasos por los puntos de control van perfectos. km 5 en 20'55'' y km 10 que era mi primer punto de control mental en 41'55''.

Todos en el grupo estamos contentos. Se oye a la gente animar a la libre y apoyar su trabajo diciendo que el ritmo es de puta madre y que lo está haciendo de cojones. Todo hasta ese punto va bien.

A partir de ese momento (km 12,5) en los avituallamientos se empieza a montar un barullo de cojones. Resulta que son muy cortos y encima solo están situados en un lado de la calzada, por lo que cuando los ves, antes de llegar al lateral para poder pillar algo, se han terminado las mesas y no has podido pillar agua.

La gente del grupo, muy solidaria y viendo el puto desastre que supone no ir bebiendo en todos los avituallamiento, se va rulando los vasos de cartón con el agua, porque los de isotónica los sirven en vasos de plástico tan pequeños que resulta imposible pasarlos.

En vez de beber bien, solamente pude beber a medias en la mayoría de los puntos. Cuando pillaba agua no podía pillar isotónica y al revés, las veces que tenia la mano libre para la isotónica era porque no me había dado tiempo a pillar el agua.

Este problema con los avituallamientos se mantuvo a lo largo de toda la carrera desde el km 10 y desde mi punto vista fue una putada bastante grande, porque el día era caluroso e invitaba a beber todo lo que se pudiese y por culpa de una organización chapucera no pudimos hidratarnos todo lo que hubiésemos querido.

A pesar de eso me mantuve bien. Paso por el kilometro 14 perfecto y según el plan en 58'45'', con un minuto de margen sobre el límite de tiempo. Bien. En el 15 me comí el primero de los geles y sin problema, ya los había probado con antelación y entro perfecto. Ya en mente estaba el paso por la media y todo iba según lo provisto.

Paso por la media en 1:29:38, clavando el ritmo, con el grupo de sub 3 bastante numeroso, todos con moral y de momento sin ver a la gente sufrir demasiado. Algunos gritos de ánimo entre los componentes del grupo y como si todos fuésemos uno solo continuamos nuestro camino a ritmo constante de 4'15''.

Estamos en la zona más fea y alejada de la carrera, en una zona de avenidas anchas, con tráfico en el carril contrario y un poco al descubierto, lo que hace que el ritmo baje 2 o 3 segundos y del 24 al 27 casi rodamos el 4'20''.

A pesar de eso nos recuperamos y el ritmo mejora a partir del 27. Todo va de puta madre y nos acercamos a la barrera psicológica del 30, cuando de repente, en el 29 sin previo aviso, la liebre se lleva la mano al cuadriceps y se para.

Casi no me ni tiempo de mirar atrás y ver que pasa, el grupo como si fuese una manada de caballos a toda velocidad sigue adelante y mantiene el ritmo, y yo en medio empiezo a maldecir el ataque de pánico que tenia verme sin liebre en un momento crucial de la carrera.

A pesar de eso, las dudas no podían durar demasiado, el tren seguía hacia adelante y en el 30 a la altura del Benito Villamarín empieza lo duro de la carrera, así que me como el segundo de los geles, compruebo el reloj y renuevo la confianza mental confirmando que puedo conseguirlo.

Juan Miguel y Antonio me esperan en el 32 y cuando se enganchan no se creen que vaya tan bien. 2:15:12, 10 km por delante y 45 minutos para terminar la carrera, vamos a ritmo de 4'15'' y puedo permitirme hasta un ritmo de 4'30'', si dosifico lo consigo y además tenemos por delante la parte más bonita del maratón.



Mis escoltas se ponen uno a cada lado y nos ponemos al lio. El 32 y el 33 mantengo el ritmo sin problemas, pero ya entrando en el parque de Maria Luisa, con sus adoquines, sus curvas y su plaza la cosa no empieza a carburar. Empiezo a notar las piernas cansadas, de pecho y de cabeza voy bien, pero el cansancio empieza a apoderarse de la zona de los gemelos.

Procuro no pensar mucho en ello y me centro en intentar seguir el ritmo que me van marcando, pero poco a poco noto que la velocidad va bajando. Intento en un par de ocasiones volver a animar las piernas, y en el 35 sigo manteniendo el ritmo por encima de 4'30''. A pesar de eso las piernas no dan más de si y dos repechos de risa me machacan el ritmo.

Ya el 38 y el 39 los estoy marcando a ritmos de 4'45’’ y estoy en el puto límite para conseguirlo. Paso por el 39 en 2:47:21, tengo 12'30'' para correr 3 km. PUEDES HACERLO JODER!!! VAMOS NACHO!!! Los gritos de Juan Miguel y Antonio me revientan los oídos y hago un último esfuerzo más por intentar aligerar el ritmo, pero es imposible. Ponerme otra vez a ritmo de 4' el km era imposible y mi mente ante la certeza de que todo estaba perdido se derrumbo. Toda mi fortaleza construida entrenamiento a entrenamiento y kilometro a kilometro se deshizo y voló por los aires.

Las piernas se mueven pero ya no responden a mis intentos de apretar. Cuando me fijo a un lado en el que hay un tío tirado en el suelo con las piernas con mas nudos que una cuerda me doy de que hace tiempo que hay gente pasándome. Veo el estadio al fondo como un gran monumento al fracaso y justo en ese momento me entra el flato como si me hubiesen hundido un cuchillo en mitad del pecho, me pare para respirar y llenar el pecho de aire, y creo que habría llorado si me quedase algo de liquido en el cuerpo, pero al no quedar nada me puse otra vez a correr lo más dignamente posiblemente para terminar.

Esos últimos dos kilómetros los pase consolándome en que seguro que mejoraría marca, pero un tremendo sabor a derrota invadía mi boca. Juan Miguel y Antonio ya conscientes de que no lo conseguía habían dejado de gritar y como buenos amigos y compañeros ya solamente estaban a mi lado casi en silencio animándome calladamente para que sacase las últimas fuerzas para llegar a meta y terminar ni sufrimiento.

En cierto modo mi fracaso era el suyo, porque aunque ellos habían caído en el camino en cierto modo habían depositado en mi sus esperanzas de triunfo, es quizás que por eso que no disfrute nada de la entrada al estadio, ni del tartán de la pista, ni del videomarcador gigante, ni de las gradas llenas de gente. Al final casi, no mire a las gradas ni a mi alrededor, simplemente termine no sin tener el frívolo detalle de intentar terminar con una sonrisa para la foto de entrada en meta.

3:04:54 todo un triunfo y a la vez una tremenda decepción.


Ya cruzado el arco de meta y mientras andaba a trompicones hacia una chica que me miraba sonriente medalla en mano todo se calmo. Me abrace con Juan y con Antonio y sin tener que decir nada les agradecí lo bien que se habían portado conmigo a la vez que en cierto modo me disculpaba por no haberlo conseguido. Fue durante unos segundos, pero con ese callado abrazo todo termino y en ese momento todo cambio.

Ya no estaba tan cansado, y la marca no parecía tan mala. Hacia un día magnifico y me puse a mirar la medalla mientras pensaba que mejorar mi marca 5 minutos no estaba tan mal y que seguía mejorando, que cojones, en 5 años siempre había ido tirando para arriba mi marca y era mi tercer maratón consecutivo por debajo de 3:10:00.


Ya con esos pensamientos y en los túneles de salida del estadio en donde estaba el avituallamiento final, empecé a beber agua y Powerade para recuperarme, me comí un par de dátiles, una naranja y en ese momento me trajeron una cerveza que apure de un trabo y mientras me la rellenaban ya estaba como nuevo. 

En esta vida y en este deporte hay que saber que cuando se pincha, se pincha y no hay que poner excusas de ningún tipo. Habrá otras oportunidades y en esas estoy seguro que lo conseguiré, vaya que si lo conseguiré.


Además, que coño, mi liebre no había terminado la carrera, el favorito para ganar se había retirado en el km 28, el maratón lo había ganado la liebre y el resto de favoritos había entrado a 4 minutos del ganador, así que seguro que en cualquier charla de bar iba a tener argumentos para defender mi marca y el trabajo realizado.

Ya analizando la carrera me he dado cuenta de que lo importantes es que seguí el plan a la perfección. Los ritmos, los tiempos de paso, los avituallamientos, todo fue perfecto y según lo que tenía en mente hasta que llegue al final donde las piernas no resistieron y creo que es positivo el haber planificado adecuadamente todo.

Así que en el fondo todo puede computar como un pequeño triunfo y una promesa de que la proxima vez, si sigo dadndolo todo, puede que lo consiga.





A lo largo de estos dís ire actualizando la entrada con fotos y videos que me iran llegando poco a poco.



jueves, 20 de febrero de 2014

10 km comodos pero exigentes

Hoy último entrenamiento antes del Maratón de Sevilla. 45 minutos de entrenamiento según planificación y un 10 km a sensaciones, comodo y ligero, visualizando la carrera y escuchando el cuerpo.

Al final entrenamiento positivo, rapido, a ritmo de carrera y sin sufrir demasiado, siendo consciente de como tiraban las piernas pero sin mirar el reloj a ver que es lo que salia. Al final el 10k en 41'25'' a ritmo de 4'10''. Perfecto.


Y con esto despedida y cierre, ya no hay más entrenamientos, antes de la salida. He cumplido con el plan, he visto como mis marcas han ido mejorando poco a poco. He mejorado mi marca en 10km y he corrido la San Silvestre Internacional, he mejorado mi marca en Media Maratón en casi 4 minutos con respecto al año pasado, las piernas estan bien y no he tenido ni sobrecargas ni contracturas, no me he puesto malo en tiodo el invierno y llego a la maratón en perfecto estado.

La climatologia prevista para el día de la carrera es excepcional con una prevision de poco viento del sur, cielo despejado y temperatura crecana a los 10º en el momento de la salida, así que no habrá excusas.

El trabajo esta realizado y ahora toca ir a la batalla y vencer o morir. Alea iacta est.

martes, 18 de febrero de 2014

Test Premaratón - 2x6000

Hoy Test pre maratón con la prueba de los 2x6000. Este es un test que de forma oficiosa te indica como estas y que tienpo puedes llegar a realizar en base a lo que hagas en dos carreras de 6000 metros.

Pues bien, el primero de los 6000 lo he corrido en 24'48, a ritmo de 4'08'' y el segundo en 23'36'' a ritmo de 3'55''.




El caso es que el primero he clavado el ritmo a lo que pedía el test que eran 25'15'', pero el segundo me ha salido un poco lento para lo que pedía el test que era 22'24''.

Pero bueno, teniendo en cuenta que el GPS en el segundo 6000 me ha pedido (como siempre) hacer mas metros por ir mas rápido, me lo tomare como un que estoy en el limiteel test para poder cumplir.

Quedan 5 dias para Sevilla.

lunes, 17 de febrero de 2014

La tensión se masca en el entreno

Hoy tocaban 50' suaves. Pero ya estoy tan tenso que he terminado haciendo 45' fuertes. 10,600 km en 44'30'' a ritmo de 4'10''. Buenas sensaciones en carrera.


Ta estoy mas tenso que la cuerda de una guitarra. Con mil cosas en la cabeza y empezando a sentir el cosquilleo del maratón por todo el cuerpo. 6 días.

sábado, 15 de febrero de 2014

The rise and fall of Lolo Jones

Aqui teneis un interesante video en dos entregas en donde se desmonta una de las grandes campañas de imagen de una atleta en Estados Unidos. Cuanta la historia de Lolo Jones, una vallista americana, imagen de algunas de las marcas más potentes del mundo y que, sin haber ganado nada nunca e ir de fracaso en fracaso en su vida profesional, ha orquestado una campaña de imagen que la ha mantenido en el candelero durante casi una decada.

Ojo, cuando hablamos de fracasos, nos referimos a una atleta que llega a finales olimpicas y de campeonatos del mundo y que esta entre las mejores del mundo. Para nada quiero desmerecer la carrera de esta chica.

para que os hagais una idea de la voracidad de esta chica en cuanto a notoriedad, actualmente esta en los Juegos Olimpicos de Invierno de Sochi compitiendo en el equipo de bobsleigh femenino de Estados Unidos.

Un claro ejemplo de como en el deporte en muchas ocasiones las marcas premian la imagen, el postureo y el marketing, frente al esfuerzo, la disciplina y los exitos deportivos.



We Are Marathoners!!

16 km - 56'

Tras el bajon de ayer hoy tocaban 70'. He salido con bastantes ganas y he rodado 16 km en 56'. Más animado que ayer.

Los nervios ya son patentes y no dejo de pensar en la carrera... Pues nada. A visualizar.

45' suaves

Ya inmerso en el tappering hoy tocaba una carrera suave de 10 km. Y he optado por un recorrido favorable a la ida y cuesta arriba a la vuelta. Dia algo lluvioso y con algo de viento. He tenido mis dudas y mis momentos de bajón de cara a la carrera.

Se que son los nervios que ya empiezan a atenazar el cuerpo y la mente. tengo que liberarme de eso y pensar en positivo, pero a veces es tan dificil quitarte la presión de la marca y el resultado.




jueves, 13 de febrero de 2014

Series de 1000 metros. 3000 + (7 x 1000) + 1000

Hoy buen entreno de miles. Un poco de viento en algunos, pero la determinación de hacerlos sub 4' ha podido mas que el viento y la posible manipulación de GPS en cuanto la distancia. ha tocado apretar y punto. 3000 + 7 x 1000 + 1000. Los miles a 4'01'', 3'42'', 3'49'', 3'54'', 4'03'', 3'58'' y 3'52''. En alguno de los miles he fallado, pero la sensación general es de un trabajo bien hecho. Quedan 10 dias para Sevilla.

martes, 11 de febrero de 2014

12 km progresivos

Hoy tocaban miles pero como tenia los gemelos un poco cargados de los esfuerzos del fin de semana, he optado por carrera continua y no forzarlos no vaya a ser que por listo la cague a 15 días del maratón.

Por eso he potado por 12 kilometros suaves y al ver que los gemelos al calentarse se han ablandado un poco los he ido haciendo en progresión, dado una media final de 4'30''.

Buenas sensaciones en general y terminando comodo.


Bad weather runners. Keep running!!

lunes, 10 de febrero de 2014

Crónica de la XXX Media Maratón de Fuencarral - El Pardo

Ayer domingo por la mañana se disputo la XXX Media Maratón de Fuencarral - el Pardo, desde mi humilde punto de vista la mejor de las medias maratones que se organizan en la capital. Y eso de que es la mejor de todas viene dado por la dureza de su recorrido, por la fecha ya que está emplazada en lo más crudo del invierno madrileño y porque es la media que más asusta a los profesionales.

En esta carrera no se ven muchas camisetas (solo algunas) de los grandes clubs de atletismo de la capital , no están las estrella de AD Maraton, ni de Bikila, ni de Clínicas Menorca ni ninguno de los habítales galgos capitalinos, aquí vienen los populares y sufridores que entrenamos Mapoma para pasar inadvertidos, por lo que el ambiente es mucho más relajado y más popular que en muchas otras carreras.

La organización de la prueba aunque ha sido absorbida por AD Maraton, no ha perdido su esencia sencilla y centrada en el trato cuidado pero humilde al corredor. Algunas carencias previas de organización e información al corredor, pero luego in situ, todo tranquilo y bien organizado, entrega de dorsales ágil y con muchos voluntarios, ropero al raso, lo que no facilito mucho las cosas teniendo en cuenta que llovió, servicio de fisios en meta y una bolsa del corredor con peso y con detalles para el corredor.

Nada fuera de lo normal, pero si que se ven mucho detalles en los que se observa el cuidado y el interés en que esta prueba siga siendo una de las señaladas en rojo por los corredores que buscan correr una buena media.

Por lo demás el día amaneció muy nublado, nubes cargadas de agua que aunque al principio respetaban la mañana no auguraban nada bueno.

La carrera era mañanera, con la salida a las 9 de la mañana, pero como tengo la salida muy cerquita de casa pude levantarme a buena hora e ir paseando con calma mientras desayunaba. Todo rápido y bien organizado, dorsal, ropero y a calentar.



Sabiendo que la salida en esta prueba es complicada ya que sale por una zona bastante estrecha no me entretuve mucho calentando y me situé bien en la salida. En esta carrera salir rápido es bueno y ayuda a pillar un buen grupo, así que con saltitos y golpes en las piernas me preparé mientras los cas 3000 corredores iban organizándose para salir.

Con un pelín de retraso se dio la salida en la que gracias a donde estaba puesto puede posicionarme bastante bien en los grupos de cabeza y como putos misiles nos pusimos manos a la obra.



La carrera tiene unos primeros 7 km muy rápidos. Tras llanear un km se enfila toda la calle Herrera Oria que es cuesta abajo con alguna zona de llano, lo que favorece poder desbocarse a ritmos muy altos. Para que os hagáis una idea, yo esos primeros 8 km fui a ritmos por debajo de 3'40'' y eso sin sufrir demasiado.

A partir del 7,5 se pilla la carretera de El Pardo y se llanea durante 5 km, en esta zona la velocidad se estabiliza y los grupos un poco sueltos de la cuesta abajo se estabilizan. En esa zona me puse a 4' el kilometro y refugiado en un grupo más o menos compacto sobrelleve bien esos kilómetros.

A estos ritmos pase por el 10 en 37'10'' (marca que acreditaría la San Silvestre Internacional), pero la organización no puso alfombra de tiempos y me quede con las ganas de que quedase registrado.

En el 12 empieza la fiesta, en ese punto empieza la verdadera Media de El Pardo y sus 9 kilómetros duros. Del 12,5 al 19 nos encontramos con una subida constante y dura, ya perro viejo en esta prueba me olvide del grupo en el que estaba integrado y busque mi ritmo para no desfondarme. Me puse a mirar el suelo y con calma me puse a subir.


El ritmo fue bajando poco a poco pero procuré no pensar en ello. Concentrándome solo en la subida cedí un poco en el ritmo en los 2 km más duros marcando km a 4'30'' y 4'40'', pero en el respiro del recorrido del 16 al 18 me recompuse y volví a ponerme 4'.

El 19 esta situado justo al lado de mi casa y allí estaba la familia animándome a saco, lo que me dio un subidón de los buenos y a pesar de estar situado en un repecho criminal hasta recuperé un par de posiciones gracias a los ánimos de mis hijos.

Los dos últimos kilómetros fueron rápidos y fáciles, mirando el reloj no me creía del todo el tiempo que estaba consiguiendo, si seguía con ese ritmo podría conseguir MMP mejorando la marca de Getafe hace 2 semanas.

Al final tiempo en meta 1:23:45 con el puesto 60 en la general de la prueba. Otra marca increíble que mejoraba casi en 5 minutos mi mejor marca en este trazado, y todo esto terminando mucho mejor de pierna y de pulmones de como termine en Getafe que sufrí muchísimo casi desde el principio.

Con lo cual se puedo extraer varias conclusiones de esta carrera. El entrenamiento de cara a Sevilla no puede haber terminado mejor ya que hacer esta marca dos semanas antes del maratón me indica de forma clara y feaciente que entrenamiento esta bien realizado y que ha surtido el efecto deseado, por lo que tengo que ir a Sevilla lleno de confianza y con la mente clara y tranquila.

 Así que nada, ahora lo que queda es reducir la carga de kilometros, tomarmelo con calma, intentar relajarme al máximo, recuperar las piernas del cansancio que han acumulado estos meses y pensar que si se puede.

Por lo demás hoy he salido a rodar para recuperar las piernas. La idea era rodar durante 10 km suave y sin mirar el reloj, pero cuando he salido a la calle me he encontrado con un huracan producido por la ciclogenesis explosiva que padecemos y he de reconer que he mariconeado y me he quedado por un circuito algo más corto y solo he rodado 9 km.

Las rachas de viento eran super fuertes y eran de estas que hasta te llegaban a mover y a empujar de lo fuerte que eran, así que nada, a rodar a 5' y a casa a darme una ducha.